Dios espera un cambio de actitud y que nuestros corazones se dispongan a sembrar la semilla del evangelio de Jesucristo, si es que somos buena tierra.
Nuestras fuerzas aumentarán, seremos como una fragancia fresca, tendremos raíces profundas y creceremos fuertes tal como la palmera y como el cedro del Líbano, todo esto, recibiremos si es que estamos plantados en la Casa de Dios.
¿De qué manera lo expresa el salmista?
- Aumentará Jehová mis fuerzas como las del búfalo y seré ungido con aceite fresco
- Estaré consciente y me sobrepondré ante cualquier problema
- Creceré como una palmera y como cedro en el Líbano
- Floreceré plantado en la casa de Jehová y en sus alrededores
- Aun en la vejez fructificaré
- Anunciaré acerca de la Justicia de Dios
¿Cuáles símbolos utiliza el salmista?
- El búfalo, como símbolo de fuerza,
- El aceite como símbolo de fragancia fresca y agradable
- La palmera como solidez en nuestros valores, ya que sus raíces son profundas
- El cedro del Líbano como símbolo de una vida robusta.
Cuando estamos plantados en la Casa de Dios, actuamos con el carácter de Cristo, no nos dejamos influenciar por las corrientes de este mundo, ni por las modas que pueden afectar al pueblo de Dios. Nos mantendremos firmes como la palmera, sin hibrido; y aun en nuestra vejez estaremos fructificando, anunciando las buenas noticias acerca de Jesús.
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