domingo, 29 de enero de 2017

La Bendición de Obed-edom

Lectura:  II Samuel 6:6-12

Pastora Belkis Fernández

“Y estuvo el arca de Jehová en casa de Obed-edom geteo tres meses; y bendijo Jehová a Obed-edom y a toda su casa. Jehová ha bendecido la casa de Obed-edom y todo lo que tiene, a causa del arca de Dios… Entonces David fue, y llevó con alegría el arca de Dios de casa de Obed-edom a la ciudad de David.” (2 Samuel 6:11-12). 

El arca representa la presencia misma de Dios. Obed-edom dispuso su casa para el Señor y esto fue notorio en el pueblo.  Este hombre es un testimonio de que sí vale la pena cuidar, con humildad y reverencia las cosas sagradas. En ningún momento Obed-edom se opuso, ni cuestionó a David diciéndole, ¿Por qué quiere trasladar el arca a mi casa y en esa circunstancia?

David al principio tenía buena intención de mover el arca, pero no averiguó la forma del traslado del arca de Dios a Jerusalén. Dios se enojó por la irreverencia y le quitó la vida a Uza. La forma de llevar el arca era en los hombros y cubierta, había todo un protocolo, el cual se quebrantó. 

Los mejores tres meses de la casa de Obed-edom fueron cuando el arca de Dios permaneció en su casa. David se enteró de que los campos y ganados y todo era multiplicado en la casa de Obed-edom y sus hijos eran prosperados. David de nuevo retoma el traslado del arca a Jerusalén y lo hizo como Dios mandó, con alegría, gozo y danza y Obed edom era uno de los porteros. Nuestra casa debe convertirse en un altar de adoración para Dios.


domingo, 22 de enero de 2017

Amor Desinteresado: No busco lo vuestro

Lectura:  Filipenses 4:17

Pastor Pedro Julio Fernández

La gracia de Dios se ha manifestado a todos los hombres. Esta gracia no es limitada ni elitista, es inclusiva y no excluye a nadie. Este favor inmerecido de Dios se convierte en “Maestra” para enseñarnos que  hay que renunciar a la impiedad y a los deseos mundanos y vivir en este mundo sobria, justa y con piedad.

Todo esto significa que el amor de Dios por la gente es magno y abarca a todo el mundo. El caso es que las personas que se benefician de la gracia de Dios no responden de la misma manera y no renuncian al pecado. Los militantes de la gracia de Dios aguardan con esperanza la manifestación de Jesucristo y se santifican mientras lo esperan.

Los militantes de la gracia de Dios reconocen el supremo amor de Dios de dar a su único hijo para  redimirnos del pecado y en función de ese ejemplo, viven como un pueblo propio, santo y celoso de buenas obras.

Si alguien no está dentro de este favor de Dios no es porque Dios lo haya desechado, sino que al recibir la gracia no renunció al pecado como debía hacerlo. (Tito 2:11-15).

Pablo incentiva, motiva a los hermanos a ser generosos, pues dando es que uno recibe y él habla de frutos y habla de cuenta a nombre del generoso (Filipenses 4:17)

El amor de Dios es un  ejemplo de desprendimiento, de amor desinteresado por nosotros (1 Juan  3:1).

Pablo no buscaba dádivas de los hombres para el enriquecerse a costa de ellos, sino que los animaba a ser imitadores de Dios.

domingo, 15 de enero de 2017

Dios Exhorta al Pueblo a Meditar en sus Caminos

Lectura:  Hageo 1:5-8

Pastora Belkis Fernández

El profeta Hageo lleva el mensaje de Dios, al gobernador, al sacerdote y al pueblo de Judá, en un momento donde muchos exiliados retornaban de Babilonia; ellos tuvieron que enfrentar crisis económica y pobreza. El Señor manda a decirle que sus afanes en concentrarse en sus propias casas, más que en la casa de Dios, de nada le había resultado. ¿Por qué la falta de voluntad de los exiliados a aportar a la Casa de Dios? ¿Por qué tanta apatía e indiferencia? Porque en sus corazones habían decidido preocuparse y priorizar decorar sus propias casas y creían que no era el tiempo para invertir en la casa de Dios.

¿Qué mensaje le envía Dios?  “Meditad bien sobre vuestros caminos. 6 Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no os saciáis; bebéis, y no quedáis satisfechos; os vestís, y no os calentáis; y el que trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto. 7 Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad sobre vuestros caminos. 8 Subid al monte, y traed madera, y reedificad la casa; y pondré en ella mi voluntad, y seré glorificado, ha dicho Jehová”. Hageo 1:5-8

La exhortación es “Piensen, mediten sobre sus caminos”, además le dice suban, traigan, edifiquen… Insta al pueblo a dejar la negligencia de artesanal y embellecer sus propias casas y les recuerda que lo que pide Dios está al alcance de todos. 

No postergue tu responsabilidad, medita y acciona para que tu trabajo no caiga en un saco roto. Dios va a prosperar al generoso de corazón y no al insatisfecho/a  que se concentra en su egocentrismo. 

domingo, 8 de enero de 2017

Honra a Dios con Bienes y Primicias

Lectura:  Proverbios 3:1-12
Pastora Belkis Fernández

Las primicias de los primeros frutos de tu tierra traerás a la casa de Jehová. Éxodo 23:19. 

Este mandamiento practicado en el A.T. conducía al pueblo a reconocer que el dueño de la tierra, de los frutos y todo lo que sirve para sostener al ser humano le pertenece a Dios. “En Pentecostés, tenían que traer a Dios las primicias de los primeros frutos, de manera que toda la cosecha quedaba santificada”. (Comentario Exegético de Toda la Biblia, M.H. p.399) 

Primicias en hebreo significa primeros maduros; era un reconocimiento de la tierra y sus frutos como un don de Dios. El mandato bíblico era no demorar la primicia. (Éxodo 22:29). “Las primicias incluían productos del trabajo del hombre tales como harina, aceite, vino, etc. Las primicias eran ofrendas de diferentes tipos, la cual se ofrecía sobre el Altar. La ofrenda de las primicias es seguida por las instrucciones de diezmar todo el producto”. (Diccionario de Teología, Harrison pág.425)

Hay una gran riqueza en este pasaje de la Escritura, pero queremos destacar los siguientes puntos:
1. Guardar su Palabra y confiar en el Señor
2. Reconocerle en todos nuestros caminos 
3. Honrarle con los bienes y las primicias de los frutos


¿Te consideras dueño de lo que tienes? Reconócelo y deja que el Señor enderece tus veredas. No te apoyes en tu propia opinión. Honra a Dios con las primicias de tus frutos y serán llenos tus graneros.