domingo, 18 de mayo de 2014

¡Sanando nuestra Ciudad! - II Reyes 2:19-24

Pastora Belkis Fernández

Dios cambia el destino de las ciudades, así lo hizo con Jericó. En Jericó sus aguas estaban contaminadas y la tierra no producía hasta que el profeta Eliseo les dijo tráiganme una vasija nueva y pónganle sal. Después que fue a la fuente principal de donde salen todos los manantiales, las aguas cesaron de contaminarse y no hubo más muerte. Jesús y su Palabra son nuestra fuente principal, aunque muchos cierren sus corazones no podemos ignorar que hay un problema espiritual en nuestra ciudad.

¿Por qué  pidieron ayuda al profeta Eliseo? ¿Cómo poder aplicar este pasaje de las Escrituras?
La ciudad de Jericó estaba muy bien ubicada y era una ciudad hermosa. Toronto es una ciudad preciosa y es leíble, ya que fue bien diseñada y planificada, pero el espíritu que se mueve, es contaminante,  acorta la vida, es dañino y produce muerte. Somos servidores de Cristo en un mundo oprimido por el enemigo de la justicia. El plan debe iniciar con nosotros mismos, nuestra familia biológica y la de la fe. Hay que abrirse a nuestro campo de misión y no arrinconarnos.

El pecado ha corrompido todo lo bueno, crece el irrespeto por Dios y aumenta la idolatría de las ofertas del mundo, muchos responden teniendo una vida espiritual ambigua y sin pagar ningún precio. 
Eliseo resolvió un problema comunitario ¿Como lo hizo? Empleó elementos que simbolizan el nuevo nacimiento, la sal y  un recipiente nuevo. Las aguas simbolizan vida y nuestros corazones, simbolizan ese recipiente nuevo, un corazón limpio. Somos sal y tenemos la misión de preservar vidas.  Tú y yo tenemos esas aguas que saltan para vida eterna que es Jesús. Asumamos nuestra responsabilidad comunitaria y no nos amilanemos.



domingo, 11 de mayo de 2014

Dorcas: Una discípula ejemplar- Hechos 9:36-43

Pastora Belkis Fernández

¿Cuáles evidencias hay  de que somos discípulos (as) de Cristo?

El nombre de Dorcas  en griego y arameo  significa “Gacela”,  (La gacela está provista de unos finos cuernos que tienen una doble función: la lucha entre los miembros de su misma especie y como elemento defensivo contra los depredadores.  La gacela alcanza velocidades de 100 km/h). (Wikifaunia).

Dorcas, una fiel discípula comprometida con los más desposeídos de su vecindad. Es la primera mujer que se le llama discípula en el N.T. ¿Quién era y que hacia? Era una mujer que fue como su Maestro.

Dorcas enferma y muere y  ya estaba lista para su funeral, hasta que buscan al apóstol Pedro y el la resucita. Él le dijo incorpórate, continua tu trabajo, vale la pena que una mujer como tu continúe viva, mira las viudas; sus rostros ya fueron cambiados. Terminó el lamento. ¿Qué será  Dios capaz de hacer por nosotros, cuando aún puede necesitarnos aquí en la tierra? Hasta resucitarnos!

Hoy no tenemos las viudas literalmente, pero estamos rodeados de un sinnúmero de “carencias” ¿Sera que te están llamando así como llamaron a Pedro para levantar a Dorcas? ¿Te conducirás en oración y con discreción? Somos agentes sanadores, a pesar de ser imperfectos. ¿Qué hacemos por los demás si estamos encarnando a Jesús? Pedro no hizo alboroto, sino más bien a solas y en oración clamó al que podía levantar a esta discípula ejemplar. ¿Dónde están los Pedros y las Dorcas? Cuando ocurran cambios maravillosos en nosotros; en nuestra comunidad  se va hacer notorio y muchos creerán en Jesús.


domingo, 4 de mayo de 2014

Te dirá lo que es necesario que hagas - Hechos 10:24-33

Pastora Belkis Fernández

¿Cuantos desean saber lo que es necesario hacer? Hay personas que están en desacuerdo con ellos mismos porque no saben que quieren en la vida. Cornelio, un hombre no cristiano,  pero simpatizante del evangelio, oraba y era generoso, buscando la manera de que Dios se le revelara y le salvara. Cornelio tuvo una visión de los primeros pasos que tenía que dar y así lo hizo. Pedro, por otra parte tiene una visión donde  Dios prepara su corazón para que rechace todo tipo de exclusivismo.

Cornelio convocó  a sus parientes y amigos más íntimos a su casa y se inclinó para adorar a  Pedro. El apóstol no recibió la adoración.  Hoy más que nunca debemos de cuidarnos de levantar  altares e  idolatría.  Las redes sociales  y los medios cibernéticos son buenos para comunicar el mensaje de Jesús, pero también facilitan el exhibicionismo y tantas cosas extrañas, que en verdad hay que retornar a las Escrituras y aun en las congregaciones hay que ser cuidadoso para no perder el enfoque de Cristo.

¿Qué es necesario hacer diría Pedro? Ya no vuelvas a inclinarte a más nadie, habla de Cristo, pero no por retazos, cuenta la historia completa de Jesús y no excluyas a nadie, pues ya te conté mi experiencia. Le diría busca lo necesario, una adoración comprometedora, una adoración con obediencia y que le agrade al Altísimo. ¿Qué debes hacer?  Primero escucha, obedece  y da testimonio; entonces ve y anuncia el  kerigma (la predicación) apostólica completa a todos, sin exclusión. Abre tu corazón y mediante la oración encontraras los primeros pasos de lo que tienes que hacer.