domingo, 28 de octubre de 2018

La Palabra de Dios en Alto

Lectura: Mateo 5:14-16

Pastora Belkis Fernández

Coloquemos la Palabra de Dios en Alto, como una ciudad en la altura, como una lámpara encendida, para que haya cambios y dirección. Estamos celebrando la Reforma Protestante y uno de los cinco solos fue “Solo la Escritura”. En un estado laico, la Escritura irradia luz de conocimiento sacando a flote las verdades.

Jesús describió al creyente como la luz del mundo. Una luz que irradia y difunde claridad, transparencia y seguridad. Pedro en su postrimería dijo: Y así tenemos la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en prestar atención como a una lámpara que brilla en el lugar oscuro, hasta que el día despunte y el lucero de la mañana aparezca en vuestros corazones (2 Pedro 1:19).

La Escritura es eficiente, suficiente y soberana para conducir nuestras vidas. Jesús coloca dos ejemplos, el de la ciudad en una colina y el de la lámpara en una casa, para tipificar el ejemplo de los creyentes en otros. En el tiempo de Jesús las casas eran alumbradas con lámparas, cuando oscurecía, podían ser guiados por la luz, al igual había pueblos que se asentaban en colinas, por su seguridad.

Cuando colocamos la Palabra de Dios en Alto, vamos a tener claridad, nos apartaremos de pecado y nuestras decisiones serán más transparentes, la palabra en alto es útil para todo. Los hombres verán en nosotros las maravillas, obras y prodigios de Cristo, por el testimonio y nuestras propias experiencias con Jesús; como resultados glorificarán al Señor.

domingo, 14 de octubre de 2018

¡Contentos en el Señor!


Lectura: Hebreos 13:5
Pastora Belkis Fernández

¿Se puede estar contento sin tener hábitos de codicia? El autor de Hebreos exhorta a practicar costumbres que sean intencionalmente sin avaricia. Contentos con lo que tenemos ahora, en medio del afán de búsqueda de una felicidad falsa.

En el versículo anterior habla de la honra que es el matrimonio y el lecho sin mancilla, pero la cultura moderna lo que promueve es la no responsabilidad en la pareja, y una de las razones es para vivir supuestamente contentos. Qué pena, caer en juntémonos y luego nos conocemos.

Contento es sinónimo de alegría, satisfacción, gozo y felicidad. La vida del creyente tiene una estructura de resistencia, resiste los embates de una felicidad utópica. Hay una preocupación que abarca lo moral y lo material. Vemos el caso de Acab y su mujer Jezabel, tramadores e inventores de maldad, por su avaricia levantaron falsos testimonio para adueñarse de la viña de Nabot y al final de qué le sirvió. Jesús confrontó el pecado de la codicia y puso el ejemplo de un rico hacendado que por querer tener más y más posesiones, perdió la oportunidad de disfrutar el “hoy”.

¿Cómo podemos aplicar esta exhortación a nuestras vidas?
  1. ¡Cuídate de la avaricia! Porque puedes perder el gozo. Ocúpate de la obra de Dios, de los maltratados y de los marginados. 
  2. Cuídate de la moral y material, para que no caigas en la idolatría. Col.3:5 
  3. Tu felicidad depende de la soberanía de Dios y no de los hombres 
  4. Confiadamente poder decir el Señor es nuestro ayudador, no temeré lo que me pueda hacer el hombre. Hebreos 13:6. 
“Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría”.


domingo, 7 de octubre de 2018

Manejando mi Propio Miedo

Lectura: Juan 6:15-21
Pastora Belkis Fernández

El miedo nos crea la sensación de impotencia, inseguridad y peligro. Adán y Eva tuvieron miedo sabían que estaban desnudos y habían desobedecido. La desobediencia te puede dejar sin protección. Moisés tuvo miedo porque pensó que lo habían descubierto, cuando mató al egipcio y decidió huir. Éxodo 2:14. Luego Dios le da los mandamientos y uno de ellos es “no matarás”. Los marineros que iban en el barco con Jonás tuvieron miedo, porque sabían que, al huir Jonás de la presencia de Dios, sus vidas estarían en riesgo. Jonás 1:5.

Estaba oscuro y el miedo se apoderó de los discípulos y comenzaron a gritar, ya que las olas agitaban con gran viento. Mateo 14:26, Jesús camina sobre el agua, como una muestra de su divinidad. ¿No vieron recientemente el milagro de la multiplicación de los panes y los peces? Y ahora, El Señor permite que ellos no lo vean.

¿Cómo le responde Jesús? Jesús les dijo: “Yo soy, no temas”.

David en el Salmo 31, presenta otro tipo de miedo, el miedo cuando alguien daña a otra persona, este miedo le causó a David daño a su cuerpo y a sus emociones. Salmo 31: 9 y 13.

Podemos decir las palabras de David, “En tu mano están mis tiempos”. Salmo 31:15(a).

El creyente debería manejar sus temores con altura, de manera saludable y no dañar su vida ni la de otros. Miedo al futuro, a la vejez, a la soledad, o ¿Cómo serán nuestros últimos días en la tierra?, entre otros temores, entrégaselo a Cristo.! El resultado, ¡Dos milagros! Jesús caminó sobre las aguas y la barca enseguida llegó a su destino! No te espante, quita el miedo e invita a Jesús para que aborde tu barca.

domingo, 30 de septiembre de 2018

Desafíos del Creyente

Lectura: Mateo 10:34-39
Pastora Belkis Fernández

En el mundo espiritual, no todos estamos en una misma página, ¿Por qué Jesús dice que vino a traer espada en vez de paz? La espada del creyente es la Palabra de Dios. Parece que muchos pensaron que Jesús vino a traer una paz automática. ¡No penséis! Vers.34.

Jesús dijo mi paz os dejo mi paz os doy; su paz no es una paz barata, una paz sin sacrificio o dolor, sino que es puesta a prueba con las personas y familias que más cerca nos relacionamos, sea de la familia biológica o la familia de la fe o las personas que trabaja con ellos. Jesús ilustra esos desafíos con las siguientes relaciones:
  1. La relación de padres e hijos y de madres e hijas 
  2. La relación nuera Vs. suegra. 
  3. Situación donde el peor enemigo es un miembro de tu propia familia. 
Jesús sabía las dificultades que enfrentan las familias, las tensiones, los conflictos y las mismas divisiones en cuanto a nuestra manera de resolver los problemas. No crea falsas expectativas, ni nos hace creer en una felicidad que no se trabaje, sino que quiere que entendamos que aun en nuestro espacio más íntimo, nuestra decisión debe ser siempre colocar a Jesús como nuestra preferencia.

¿Quién es tu prioridad? Jesús deja claro que aquel que prefiere a sus hijos/as más que a Él, no merece ser de Él. Todo este pasaje es para llevarnos a cargar nuestra propia cruz, no la de otro. A entender que debemos dejar el egocentrismo y perder algo menor para ganar algo mayor. ¿Cómo Dios espera que te comportes en un momento de tensión familiar? ¡Puedes resistir, pero con la armadura de Dios! ¡Jesús es honesto! No nos pinta pajaritos en el aire.

domingo, 23 de septiembre de 2018

El Poder de las Palabras

Lectura: Salmo 19:7-14
Pastor Alfredo Arévalo

"La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón; El precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos. El temor de Jehová es limpio, que permanece para siempre; Los juicios de Jehová son verdad, todos justos. Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado;Y dulces más que miel, y que la que destila del panal. Tu siervo es además amonestado con ellos; En guardarlos hay grande galardón. ¿Quién podrá entender sus propios errores? Líbrame de los que me son ocultos. Preserva también a tu siervo de las soberbias;Que no se enseñoreen de mí; Entonces seré íntegro, y estaré limpio de gran rebelión. Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti, Oh Jehová, roca mía, y redentor mío." 
Salmo 19:7-14 (RVR)

domingo, 16 de septiembre de 2018

Conviene que “Yo” Disminuya Parte 2

Lectura: Juan 3:30/Mateo 11:11
Pastora Belkis Fernández

“Yo no soy el Cristo” dijo Juan el Bautista cuando los líderes religiosos preguntaron acerca de su identidad. Juan 1:20. El aclaró no era el más importante.

Observamos previamente lo siguiente:
  • Juan el Bautista no había sido encarcelado. Juan 3:24 
  • Hubo discusión entre los discípulos de Juan y los de Jesús. El bautiza y “Todos vienen a El” 
  • ¿Qué aprendemos de la actitud de Juan? Juan 3:27 
Dos grupos estaban en tensión y conflicto, hasta que Juan el Bautista les aclaró que esto era necesario que acontezca. ¿Sería que enfrentaban una atmósfera de competencia? Diría Juan, yo no compito con Jesús, soy amigo y me gozo de lo que está pasando. ¿Qué mensaje nos deja Juan a nosotros hoy?
  1. ¿Nos gozamos cuando tenemos que ceder hasta morir a nuestro propio yo? 
  2. ¿Qué es necesario hacer para levantar a Jesús y ser reducido? 
  3. Cuando Dios te envía, El coloca su Palabra en tu boca y él no te da el Espíritu por medida. Juan el Bautista disminuyó sin buscar explicaciones. 
En Mateo 11, vemos el otro escenario, cuando ya Juan el Bautista estaba encarcelado, tuvo confusión y no estaba seguro de que Jesús era el Mesías. ¿Cuál puede ser una de la razón? El mensaje de juicio que esperaba que Jesús anunciara. Ver Mateo 3:12” Su aventador está en su mano…”. ¿De qué manera le responde Jesús a Juan?

Dejemos el juicio y actuemos como Jesús actuó, no con palabras sino con hechos concretos, ¿Qué oyes? ¿Qué ves? Un mensaje de misericordia. porque la misericordia triunfa sobre el juicio. Santiago 2:13. Escuché a alguien decir tu trabajo no es convertir, tu trabajo es amar, sin importar su condición.


domingo, 9 de septiembre de 2018

Conviene que “Yo” Disminuya

Lectura: Juan 3:30
Pastora Belkis Fernández

Jesús reconoce la atracción que siente el hombre en el mundo y la decisión mayoritaria de amar más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas. ¿Por qué no vienen a luz? Para no ser descubierto y para que sus obras no sean reprendidas.

Es a partir de este momento que encontramos un posible conflicto el cual fue aclarado por Juan el Bautista porque ya había dos maestros, predicadores anunciado el evangelio, tanto Juan como Jesús y ambos también bautizaban, pero solo uno es el Salvador. ¿No será que enfrentaban una atmósfera de competencia?

¿Qué era lo que les preocupaba a los discípulos de Juan? ¡Que aquel maestro llamado Jesús bautizaba más y que todos se iban con el! No era fácil, pero entendió su parte. ¿Qué actitud tomó Juan? 
Tranquilo, todo lo que está pasando es parte del plan de Dios. Para que entiendan mejor le dijo que el que tiene la esposa es el esposo. ¿Qué enseñanza tan transparente nos deja Juan?

Diría, yo no compito con Jesús, soy amigo y me gozo de lo que está pasando. ¿Qué mensaje nos deja Juan a nosotros hoy?
  1. ¿Realmente nos gozamos cuando tenemos que ceder, disminuir y hasta morir a nuestro propio yo? 
  2. ¿Qué es necesario hacer para levantar a Jesús? ser reducido y ser reemplazado levantando a Jesús? 
  3. Cuando Dios te envía, él no te corta el llamado, él no te da el Espíritu por medida 
Juan el Bautista, entendió su parte aquí en la tierra. Aquietó a sus seguidores y disminuyó y no buscó explicaciones, sino más bien entendió que el control absoluto no está en la tierra, sino en el cielo, que depende lo que Dios decida. 


domingo, 2 de septiembre de 2018

El Hombre Interior

Lectura: 2 Corintios 4:16-18
Pastor Pedro Julio Fernández

El ser humanos es un ser tripartito, es decir, tiene tres partes en su composición. El cuerpo es la única parte visible y el espíritu y el alma son invisibles e intangibles (1 Tes 5:23). El cuerpo es el hombre exterior que se va desvaneciendo con el tiempo y por las enfermedades. El hombre interior se va renovando día a día hasta llegar a la estatura de un varón perfecto (Efesios 4:13)

Solo la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón (Hebreos 4:12). La palabra de Dios puede recorrer la totalidad del ser humano en los ámbitos del hombre exterior y hombre interior

Cuando Pablo narraba las vicisitudes por las cuales pasaba escribió diciendo: Por tanto, no desfallecemos, antes bien, aunque nuestro hombre exterior va decayendo, sin embargo, nuestro hombre interior se renueva de día en día. Pues esta aflicción leve y pasajera nos produce un eterno peso de gloria que sobrepasa toda comparación, al no poner nuestra vista en las cosas que se ven, sino en las que no se ven; porque las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas (2 Cor 4:16-18).

De la misma forma los hijos de Coré cuando estaban en momentos angustiosos se decían: Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, Así clama por ti, oh Dios, el alma mía. Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo; ¿Cuándo vendré, y me presentaré delante de Dios? ¿Por qué te abates, oh alma mía, y te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle,

Salvación mía y Dios mío.

domingo, 26 de agosto de 2018

Los Dones y los Frutos

Lectura: Mateo 7:21-23/Lucas 6:43-44

Pastora Belkis Fernández

El Señor está interesado en los frutos, Jesús dijo no todo el que me dice Señor, Señor entrará al reino de los cielos. Podemos usar nuestros dones y dejarnos usar en nuestra área más fuerte, mostrando a los demás nuestros talentos, pero a través de los dones, no se alcanza salvación. Dios busca frutos, frutos de obediencia a su Palabra, de arrepentimiento y lealtad.

Una fe estéril, una fe de boca, una fe de apariencia no es la que toca el corazón del Señor, es de ahí que Santiago dice que la fe puede estar muerta y el apóstol Pablo le habla a Timoteo acerca de que su formación no procedió de una fe fingida.

Los dones y/o talentos son importantes para el crecimiento espiritual del cuerpo de Cristo, pero si esos dones no están acompañados de los frutos, de nada sirve, el Señor espera que fructifiquemos. ¿Están los frutos sujetos a las circunstancias del creyente?

Muchos hacían obras que hasta podían impresionar a muchos, eran grandes obras y Jesús mismo los condenó porque hacían obras, predicaban, echaban fuera demonios, servían de diferentes formas, hacían milagros, pero ninguno había tenido un genuino encuentro con Jesús.

Apartados de mí dice el Señor a aquellos que, a pesar de haber recibido dones, no tenían frutos. ¿Se contradice la Palabra? ¡No! Simplemente que la seguridad de nuestra salvación no descansa en los dones que ejercemos sino en los frutos. Un árbol malo, no puede producir buen fruto. Cuando damos frutos dignos de arrepentimiento, entonces estamos aptos para ejercer nuestros dones para la gloria del Señor, y crecimiento y desarrollo espiritual.

domingo, 12 de agosto de 2018

Una Renovación Completa

Lectura: Romanos 12:1-2
Pastora Belkis Fernández

¿Quién ha conocido la mente del Señor? ¿Quién llegó hacer su consejero? A veces pensamos que podemos leer el pensamiento de Dios. Pablo dice porque de Él, por El y para El son todas las cosas. A Él sea la gloria para siempre. Rom 11:34

El apóstol Pablo reconoce cuán grandes son las misericordias de Dios, y de ahí pide que sometamos nuestras vidas en un sacrificio vivo, santo y agradable a Dios. Un sacrificio distinto a como lo hacían en el antiguo pacto, llevando un animal para ser sacrificado y de esa forma obtener la redención de su pecado, sino más bien colocando el cuerpo y la mente como un terreno en el cual tenemos que estar cuidando, para así morir al pecado y como creyente ser instrumento de justicia.

El ser humano es fácil de acomodarse a lo que ve, lo que oye y lo que cree que necesita, por esa razón dice no nos conformemos a los valores y conducta que predomina en este mundo, sino que procedamos a una renovación completa que nos permita comprobar su perfecta voluntad.

¿Qué pasa cuando hay una renovación completa?
  1. Disciplinamos la mente, llenándola de las Escrituras 
  2. Vivimos sin correr ni seguir la moda o los valores del mundo 
  3. Mantenemos una actitud humilde, aplicando la cordura sobre nosotros mismos 
¿Cómo sometemos a prueba nuestra voluntad en nuestra vida diaria? ¿Realmente usamos la mente y la razón para comprobar la aprobación de Dios? ¿Tomamos decisiones solo en la esfera de las emociones?

Necesitamos una renovación por completa, de manera que ningún tipo de circunstancias nos mueva de nuestra forma de pensar. Todo esto es para llegar a la conclusión que somos instrumentos de justicia que buscamos ofrecer a diario un culto racional, renovándonos íntegramente.

domingo, 5 de agosto de 2018

El Nombre de Jesús

Lectura: Hechos 4:8-12
Pastor Pedro Julio Fernández

La persona de Jesús fue rechazada por el pueblo judío y su liderato. En esta cita de Hechos 4 los judíos son llamados los edificadores y Jesús es llamado la piedra desechada (v.11).

Resulta que mediante la fe en el nombre (persona) de Jesús un hombre con una edad de más de 40 años y paralítico de nacimiento fue sanado (Hechos 3:2 y 4:22). Como este milagro de sanidad fue tan notorio porque el ex-cojo era bien conocido, la gente quería sabe cómo ocurrió y quién lo hizo. Pedro explicó que por la fe puesta en Jesús ese hombre fue sanado (3:16).

La prédica de Pedro abarcó todo lo que es el evangelio de Jesús y hubo una masiva conversión de judíos al cristianismo llegando la membresía a cinco mil hombres (4:4).

Pedro y Juan siempre resaltaron la persona de Jesús (nombre) como el causante de la salud del cojo y desligaron sus nombres del milagro (3:12). Explicando al liderato judío de cómo Dios hizo el milagro, exaltaron una vez más el nombre de Jesucristo como la única vía puesta por Dios para que todos los seres humanos se puedan salvar y no solo el ex-cojo (4:12).

Esto fue lo que el mismo Jesús predicó y enseñó en Juan 3:14-21 y 12:32 que como Moisés levantó la serpiente de bronce en el desierto, Dios el Padre lo haría con él para que todo aquel que cree, tenga vida eterna. La Biblia dice que la justicia de Dios es por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia, por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados (Romanos 3:22-25).

Jesucristo es la única persona que puede salvar a cualquier persona que invoque su nombre.

domingo, 29 de julio de 2018

El Evangelio de Jesús

Lectura: Hechos 8:32-35
Pastor Pedro Julio Fernández

El evangelio de Jesús es buena nueva y no hace daño a nadie como muy bien lo resume Isaías 61:1-11

La vida de un individuo cambia drásticamente cuando recibe las bondades del evangelio. Tras el arrepentimiento hay perdón de pecados, tiempos de consuelo, la esperanza de la venida de Cristo y una vida alejada de la maldad.

El funcionario etíope que vino a Jerusalén con el plan de adorar a Dios se regresaba leyendo al profeta evangélico Isaías en lo que ahora es el capítulo 53. Partiendo de esta cita Felipe (no el apóstol) inició la prédica del evangelio de Jesús y este hombre confesó a Jesucristo arrepintiéndose y bautizándose en agua.

El arrepentimiento tiene efecto retroactivo porque borra el pasado, nos da un presente con el consuelo de Dios de tiempos de refrigerio, nos da la esperanza de una vida mejor con la venida de Cristo y nos confirma por su palabra que esto es profético. El etíope se fue gozoso.

Este caso es buen ejemplo que demuestra que el evangelio cambia a quienes creen en Jesucristo. Romanos 1:16-17 dice: “Porque no me avergüenzo del evangelio, pues es el poder de Dios para la salvación de todo el que cree; del judío primeramente y también del griego. Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe; como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.

Felipe no se avergonzó, sino que predicó lo más básico del evangelio de Jesús, su muerte expiatoria como oveja que muere y los logros de ese sacrificio que es la multitud de gente salva por haber dado su vida (Hechos 8:32-33). Eso fue todo para que este hombre creyera y se salvara (Hechos 8:37).

domingo, 22 de julio de 2018

El Cántico de Ana

Lectura: 1 Samuel 2:1-11
Pastora Belkis Fernández

Ana en principio oraba en amargura (1 Sam.1:10) y también quebrantó su corazón delante de Jehová y luego trajo un cántico con un tono y una actitud distinta, expresó un canto de victoria, luego María la madre biológica de Jesús tomó este cántico (El Magníficat en Lucas 1:46-55) para exaltar a Jehová en condiciones similares. Ana ahora puede reír y estar alegre, porque ya no tiene la actitud de amargura sino de agradecimiento.

Durante los procesos muchas veces entendemos que no conviene hablar, porque al hablar expresamos a veces palabras arrogantes. Es cierto, ¡A Dios es que le toca pesar las acciones! El cántico de Ana es en parte una analogía entre los débiles y los fuertes, los saciados y los hambrientos, los que tienen hijos con las estériles; para entender que cuando tenemos a Dios pase lo que pase el control está en sus manos y no en la nuestra. Ana atribuye a Dios la potestad de matar o dar vida, de descender o levantar del seol, de empobrecer y de enriquecer, de abatir y de enaltecer, de levantar del polvo al pobre y de exaltar al menesteroso.

Dios estaba al tanto de los sufrimientos de Ana, del ambiente tan vulnerable de su comunidad y como juez justo, va a juzgar a todos. Su poder es tan grande que tiene columnas que afirman la tierra. El guarda a sus santos y deja claro que nadie es fuerte por su propia fuerza. Este cántico es un agradecimiento y nos preguntamos, después que pasa la tormenta, ¿A quién le damos el crédito de la victoria que obtenemos?



domingo, 15 de julio de 2018

Todos se Pueden Salvar

Lectura: Juan 3:14-21; 12:32
Pastor Pedro Julio Fernández

El episodio de las serpientes ardientes que mordían de muerte al pueblo hebreo murmurador sirvió como ejemplo para la predicación de Jesús. Para remediar el daño de las serpientes, Dios mandó a Moisés a hacer una serpiente de bronce y colocarla en lo más alto de un palo que todos pudieran ver. Quien murmuraba y era mordido por la serpiente se podía salvar si miraba la serpiente de bronce (Números 21:9).

Jesús dijo que como Moisés hizo eso, Dios el padre lo haría con él para que todo aquel que cree, tenga vida eterna. El pecado es una mordida de muerte y la fe en Jesús es el remedio. La Biblia dice que la justicia de Dios es por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia, por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados (Romanos 3:22-25).

Es una acción descabellada perderse cuando uno se puede salvar de la mordida del pecado. Quienes optan por el veneno de la serpiente lo hacen por el orgullo de no reconocer su falta y muchas veces culpan a otros por sus propios errores. Jesús enseñó que el que cree en él, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios. Creer es un asunto de pura fe y ésta, cual medicina o antídoto te libra de los efectos del pecado.

Dios no quiere que nadie se pierda, sino que todos vengan a la vida eterna.

domingo, 8 de julio de 2018

Más que Vencedores

Lectura: Romanos 8:35-39

Pastora Belkis Fernández

El creyente nacido de nuevo es un campeón en cualquier terreno que combata. Pablo hace alusión a las cosas más difíciles que un ser humano pueda enfrentar y en todo el cristiano sale airoso. Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre. En Cristo somos más que vencedores. “Mas que vencedores” en griego significa hupernikao, huper, “sobre o por encima de” y nikao, “conquistar”. Es una victoria en grado sumo, una victoria más que ordinaria. Triunfo absoluto, debido a su amor eterno. (Strong #5245).

El apóstol Pablo habla de su propia experiencia a la cual él tuvo expuesto. El lenguaje que emplea de tribulación, angustia, persecución y hambre, desnudez, peligro o espada es porque en algunas de esas circunstancias todo ser humano tiene que pasar, pero cuando somos creyentes nos mantenemos en una actitud sana, que aun al dolor y sufrimiento le sacamos provecho, no porque somos fuertes o por orgullo o arrogancia sino porque sabemos que el Señor tiene toda soberanía y poder sobre todo lo creado.

Así como el apóstol Pablo estuvo seguro, así nosotros también estamos seguros de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo porvenir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro.

La circunstancia que nos agobia, los temores y frustraciones, son parte de todo un proceso que nos ayudará a salir en victoria. En Cristo somos más que vencedores si y solo si amamos a Dios y no andamos en los deseos de la carne, sino conforme al Espíritu.

domingo, 1 de julio de 2018

Un Instrumento Escogido

Lectura: Hechos 9:10-19
Pastora Belkis Fernández

Saulo oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿Por qué me persigues? Al perseguir a los creyentes, era al mismo Jesús a quien perseguía. Saulo estuvo tres días sin ver porque quedó ciego y además no comió ni bebió. Hechos 9:4

El Señor le dice a Ananías, quien era un discípulo de Jesús en Damasco ve donde Saulo porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en la presencia de los gentiles, de reyes y de los hijos de Israel. Hechos 9:15. La oferta que le hizo Jesús fue la del sufrimiento, diciéndole vamos a prepararlo porque este hombre va a padecer por mi causa.

Ananías, sabía que Saulo perseguía a los creyentes y no quería ir, pero no le quedó otra cosa más que obedecer y fue al encuentro y le dijo, hermano Saulo, el Señor Jesús me envió para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo. Entonces le cayeron de sus ojos como escamas y recibió la vista y fue bautizado. Tomó alimento y recobró fuerzas.

El Ser instrumento escogido se paga el precio del vituperio, insulto y humillación. Dios escogió a Saulo quien es Pablo, como un instrumento para que la obra de Dios creciera en áreas donde otros discípulos no habían llegado y para usarlo de una manera distinta a la tradicional de su época y su cultura.

Para Dios usar a hombres y mujeres tienen primero que tener la vista clara para que entiendan el llamado y estar llenos del Espíritu Santo. Somos instrumentos escogidos por Dios para anunciar las virtudes de Dios.



domingo, 24 de junio de 2018

La Carrera de la Fe

Lectura: Hebreos 12:12-17
Pastora Belkis Fernández

El autor de Hebreos nos habla de la carrera de la fe, para animarnos a despojarnos de todo lo que impide correrla con paciencia. Uno de los problemas que puede enfrentar el que corre la carrera de la fe, es poner su mirada hacia otro lado de la meta o de los que están en la competencia y esta acción de ver a los demás, nos saca de los propósitos de la fe.

Parte de los procesos del que anda en la carrera de la fe, son los siguientes:
  1. El sufrimiento, para ayudarnos a mantener el ánimo 
  2. La disciplina, como parte del plan de Dios para que podamos dar frutos 
  3. El amor fraternal para colocar a prueba nuestra fe, en la convivencia y unión con el cuerpo de Cristo. 
¿Aceptamos la corrección de Dios o la rechazamos? Job 5: 17-18

Por más difícil que sea nuestro problema, debemos correr de tal manera que nuestros brazos y nuestras rodillas estén activos en movimiento de oración. La circunstancia no debe movernos de mirada hacia otro lado que no sea la meta mirando a Jesús. Dios utiliza el sufrimiento, medidas de disciplina y nos pone a prueba en nuestra relación fraternal para conocer nuestra integridad y compromiso con el autor de nuestra salvación.

Estamos expuestos a cometer errores y es importante la disciplina y el consejo a tiempo. Dejemos que el Espíritu Santo quien es un genuino entrenador haga de nosotros verdaderos corredores con todo el potencial de ganar. De lo contrario pagamos grandes consecuencias y hasta podemos perder la vida y la salvación.

domingo, 17 de junio de 2018

El Poder de la Fe

Lectura: Marcos 11:20-26
Pastor Pedro Julio Fernández

Uno no puede orar a Dios y al mismo tiempo dudar. Los problemas que a diario enfrentamos son como montañas que pueden ser removidas por una firme creencia en Dios. Pide sin dudar porque “cualquiera” que pide creyendo, lo recibirá. Creer en Dios no es un patrimonio de un grupo selecto, sino de cualquiera persona que lo haga confiando en Dios.

El mismo Jesús creía y confiaba en Dios y por eso las cosas ocurrían. Por el eso le dijo a Pedro que tuviera fe en Dios, que creyera y que no dudara.

Cuando Santiago aborda el tema de la fe y la duda en Santiago 1 dice que el que pide sin fe es de doble ánimo y que no va a recibir nada de Dios, ya que es inconstante como las olas del mar. En el cap. 4 Santiago recomienda a los de doble ánimo que purifiquen primero sus corazones.

El libro de Hebreos recomienda acercarnos a Dios creyendo que Dios existe y que Dios se agrada y galardona a tales creyentes.

Es grande el poder de la fe porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos al dominar imperios y conquistar reinos y hacer justicia. Ahora Jesús dice que un problema (montaña) se mueve mediante la fe en Dios (Marcos 11:23).

La fe viene por el oír la palabra de Dios y Dios la ha enviado a todos, para que todos tengan la misma oportunidad de ser salvos y de vivir por fe. Cuando Jesús usa la palabra “cualquiera” es para no excluir a nadie, pero también para que todos sepan que la fe no es un patrimonio de un grupo selecto. También el poder de la fe está radicado en la capacidad de perdonar (Marcos 11:25-26).

domingo, 10 de junio de 2018

La Palabra Implantada

Lectura: Santiago 1:21-27
Pastora Belkis Fernández

¿Para qué y por qué venimos a la iglesia a escuchar la Palabra de Dios? Hay una labor que el Espíritu Santo va produciendo en cada uno de los creyentes y es el quitar o despojar áreas de nuestras vidas que necesitan ser transformada. El problema está en el corazón, de ahí que Santiago aconseja que debemos recibir con mansedumbre la Palabra implantada para poder salvar nuestras almas.

¿Cómo proceder para que la Palabra quede implantada?
  1. Prestando atención a la instrucción. Pedir discernimiento, agarrar la palabra, tener intuición. Nehemías 8:1-8 
  2. Removerlo que hay plantado (en el corazón) murmuraciones, odio, resentimiento, problema de carácter, ira, palabras descompuesta, entre otras prácticas pecaminosas. 
  3. Implantar la Palabra del evangelio, las buenas noticias. El primer paso es desarrollar el oído. Oír con un propósito, oír para accionar. 
Problema central que plantea Santiago:
  1. El oidor olvidadizo, que se considera a sí mismo y se olvida cómo era. Ve en el espejo su fisonomía propia, su apariencia natural y se olvida. 
  2. El que no controla su lengua. La pureza del corazón se refleja en la lengua. Mateo 12:36 
  3. El que resuelve su problema con la ira y la violencia, creyendo que aplica justicia. 
Desecha todo pecado que te lleva a no desarrollar el oído espiritual. Toma en serio los cambios que necesitas hacer en tu vida, asume la responsabilidad de practicar lo que oyes. Utiliza la Palabra de Dios y mírala como un espejo, déjala implantada y que abunde en frutos. Ocúpate del servicio y deja de concentrarte en ti mismo o en convertirte en un/a maestro/a arrogante.

Me imagino a Santiago diciéndote, ¡Pruébate a ti mismo y mira si el evangelio es eficaz en tu vida!


domingo, 3 de junio de 2018

Jesús Perdona y Sana a un Paralítico

Lectura: Mateo 9:1-8
Pastora Belkis Fernández

En esta ocasión Jesús cruzó al otro lado del lago para llegar al pueblo de Capernaum, donde vivía y allí, algunas personas le llevaron un paralítico, acostado en una camilla. Jesús observó la fe puesta en operación por esas personas que lo llevaron y le dice al paralítico, ten ánimo hijo, tus pecados te son perdonados. En el ambiente no faltó la murmuración hacia Jesús y le dijeron que era un blasfemo. No reconocieron su autoridad y su deidad. Jesús les hizo dos preguntas: ¿Por qué pensar mal en nuestros corazones? ¿Qué es más fácil decir los pecados te son perdonados o decir, levántate y anda? Jesús les aclaró su identidad de que era el Hijo de Dios y le dijo al paralítico, levántate, toma tu cama y vete a tu casa. La gente glorificaba a Dios.

¿Que aprendemos de este pasaje de la Escritura?

1. Jesús sabe apreciar la sinceridad y la fe de los que te rodean y buscan llevar al necesitado a Cristo, así como llevaron a este paralítico. El admiró la fe de ellos.

2. Jesús se dirigió con ternura, le dijo hijo y empleó su divinidad como una evidencia de que es Él es el Hijo de Dios. Le dijo al paralítico, tus pecados te son perdonados, parece que su parálisis estaba conectada con algún pecado que había cometido y quizás estaba en un estado de culpabilidad.

3. Jesús cuestionó los malos pensamientos. El Señor conoce las intenciones de los corazones. Las murmuraciones y la duda no edifican y Dios está al tanto de todo.

4. La gente glorificó a Dios por las maravillas de este milagro y Jesús lo mandó para su casa. 


domingo, 27 de mayo de 2018

Pidan, Busquen y Llamen

Lectura: Mateo 7:7-12
Pastora Belkis Fernández

Previamente Jesús aconseja a no juzgar a la otra persona y a cuidarse de los hipócritas que en su tiempo eran personas que oraban, pero con sus hechos demostraban lo contrario a su oración.

El pedir, buscar y llamar en el texto que habla Jesús es perseverar, aunque la respuesta que nos dé sea distinta a la nuestra. El que confía en Dios se somete a su soberanía.

Jesús les dice que ningún padre le dará una piedra a su hijo si le pide un pan, ni le dará una serpiente, si le pide un pescado. El Señor le dice si ustedes siendo padres malos hacen cosas buenas, ¡Que no sería Dios! ¿Te imaginas la justicia de Dios? No hay formas de comparar la gracia divina, su amor eterno con todo lo que puede ofrecer un padre biológico.

La paternidad biológica tiene sus límites, pero Dios lo alcanza todo, porque su justicia es la única que puede dar la respuesta a los vacíos que tiene la humanidad, producto del pecado. No hay formas humanas e intelectuales que den con la solución de los problemas, solo Jesús a través de la Escritura llena esos vacíos y carencia que existen en la humanidad.

¿Que Dios tiene para mí? Dice Santiago que toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación. En otra versión, Dios nunca cambia, fue Dios quien creó todas las estrellas del cielo, y es quien nos da todo lo bueno y todo lo perfecto. Santiago 1:17.

Entreguemos a Dios nuestras peticiones y confiemos en su divina intervención, deja que Jesús responda a su tiempo y en base a su soberanía y cuando perseveras en la oración, no olvides que debes tratar a los demás como ustedes quieran ser tratados, porque eso nos enseña la Biblia.

domingo, 13 de mayo de 2018

La Expectativa de una Madre

Lectura: Mateo 20:20-25
Pastora Belkis Fernández

Hay expectativas de los padres hacia los hijos que muchas veces no son las apropiadas, en el caso de la madre de Juan y Santiago, ella pretendía para sus hijos una posición de estatus y de honra en la sociedad.

La petición de la madre a Jesús fue, ¿Ordena que en tu reino se sienten estos dos hijos míos, el uno a la derecha y el otro a la izquierda?

Respuesta de Jesús “Tú no sabes lo que pides”. Porque no sabe si el reino es físico como el de David o es un reino espiritual. Ella es el modelo de los padres que quieren estatus para sus hijos sin lograrlo a través del esfuerzo, del trabajo y más aún, del servicio a los demás para lo cual hay que humillarse. pues el liderazgo efectivo en el creyente es para dar y servir.

Jesús defiende a los dos hermanos, ante el resto de los apóstoles cuando se enteraron de esa petición egoísta. Jesús sabe la vida completa, vemos que Santiago fue decapitado (Hechos 12:2) y Juan torturado y exiliado en Patmos. (Apocalipsis 1:9). Al final de cuenta, Dios tiene control de tus hijos/as.

Jesús vio la ambición de la madre y una petición equivocada. Como madre, ¿Cuáles son tus expectativas para con tus hijos/as?

Puede ser una madre de influencia, pero no siempre tus derechos son efectivos para Dios ni debes de exigirlos. ¿Qué pides a Jesús para tus hijos/as? Que se entreguen a los demás, que amen y sirvan de corazón y la mejor forma de enseñarles es mediante el ejemplo de los padres, que los hijos/as entiendan que donde lleguen, no llegan a exigir ni a pedir sino a dar y a servir y así serán grandes en el reino de Dios.

¡Feliz Dia de las Madres!

domingo, 6 de mayo de 2018

De Jehová es la Batalla

Lectura: I Samuel 17:1-34
Pastora Belkis Fernández

Los filisteos mantenían en zozobra al pueblo de Israel. En la escena de 1 Samuel 17 dos ejércitos colocados en orden de batalla, pero sobresale el paladín filisteo Goliat, vestido y armado con un equipaje moderno. En esta narración vemos la siguiente trama:

A. Amenazas del filisteo Goliat: 1 Samuel 17:16

B. El miedo de los varones de Israel. 1 Samuel 17:24

C. Menosprecio de Saúl a David de no ir a pelear con Goliat. 1 Samuel 17:33

D. David rechaza las armaduras colocadas por Saul. 1 Samuel 17:39

David, un humilde pastor de ovejas aceptó el reto de enfrentar a Goliat y se arma con una honda y cinco piedras para pelear contra él (1 Samuel 17:49-50). Dios ama la dependencia de él y no la autosuficiencia de Goliat. ¿Cómo podemos enfrentar el gigante? Colócate las armaduras de Dios para que combatas los dardos de fuego del maligno. La fe, la confianza y la paciencia nos darán la victoria aunque el problema sea grande como Goliat. Los varones de Israel tenían miedo y esto le impidió enfrentar al paladín Goliat. El miedo inhabilita y no te deja ver el proyecto final.

Jesús es la fuente de nuestra fortaleza, todo lo podemos en él. Los gigantes que se oponen contra ti, ya Cristo los venció en la cruz del calvario. Las batallas son de Jehová, si te menosprecian, no utilices tu propia justicia, deja que Dios pelee por ti. Los hermanos de David lo menospreciaron y aun el rey. Trabaja las amenazas utilizando principios bíblicos, tal como David y como Gedeón, ganaron batallas con pocos recursos. Porque al fin y al cabo, la batalla no es nuestra, sino de Dios.

domingo, 22 de abril de 2018

Un Mensaje para Todos: ¡Velad!

Lectura: Marcos 13:33-37
Pastor Pedro Julio Fernández

Porque no sabéis cuándo es el tiempo señalado. Es como un hombre que se fue de viaje, y al salir de su casa dejó a sus siervos encargados, asignándole a cada uno su tarea, y ordenó al portero que estuviera alerta. Por tanto, velad, porque no sabéis cuándo viene el señor de la casa, si al atardecer, o a la medianoche, o al canto del gallo, o al amanecer; no sea que venga de repente y os halle dormidos. Y lo que a vosotros digo, a todos lo digo: ¡Velad!

Este es un mensaje de advertencia para el bienestar de nuestras vidas. Las advertencias de Dios no son malas, sino buenas (Hebreos 10:26-31). Las advertencias de las autoridades que nos gobiernan no son malas, son buenas. Cuando hay peligro en el camino o en otro lugar es bueno saberlo para esquivarlo.

En esta pequeña narración de Jesús él usa la figura del hombre hacendado que se va de viaje y asigna tareas a cada uno de sus trabajadores y le encomienda al portero que esté en alerta porque no sabe a qué hora del día o de la noche va a regresar. Finalmente les dijo a todos: ¡Velad!

Jesús es el Señor de la casa, nosotros somos sus siervos, antes de irse al cielo nos mandó a predicar el evangelio como nuestra tarea (2 Timoteo 4:2). Nos dio el Espíritu Santo para que tengamos poder de hacer lo que nos mandó (Hechos 1:8). También nos mandó a estar alerta y ver las señales que anticipan su regreso (1 Pedro 1:13)

En lo que el Señor regresa hagamos la tarea que nos encomendó y no durmamos como aquellos que no tienen esperanza.

domingo, 15 de abril de 2018

El Señor es tu Guardador

Lectura: Salmo 121:1-8
Pastora Belkis Fernández

La vida del ser humano es un peregrinar, es un viaje donde tenemos que enfrentar desafíos, pero en todo momento a sus hijos Dios les garantiza cuidado y protección.

¿Cuándo nos sentimos protegidos? Un infante en los brazos de sus padres, por ejemplo. ¿Hacia dónde colocamos nuestra mirada ante el peligro? La ponemos en quién o quiénes nos puedan proteger. El pueblo de Israel tenía esos montes, los más altos y hasta ahí colocaba su mirada y algunos en el templo.

¿A dónde alzamos nuestros ojos? Dios nos guarda en todo tiempo y en los diferentes ciclos de nuestras vidas, aun desde el vientre de nuestra madre, ya nos miró y ha hecho planes para nosotros. El salmista expresa que alzó sus ojos a los montes, pero los montes no le respondieron, sino que su ayuda vino del que hizo los montes y toda la creación, de Jehová de los ejércitos.

El Creador, nuestro Señor no se equivoca, no se duerme y tiene un equipo celestial que nos protege aquí y aun cuando tengamos que salir de este mundo. ¡El Señor es grande!

Jehová es tu sombra a tu mano derecha. El conoce lo que nos hace falta, sabe librarnos de todo mal y a pesar de que somos tan limitados porque no vemos más allá, porque nos enfocamos en lo que deseamos ahora, en algo tangible, en lo que vemos y palpamos; pero aun así Dios tiene misericordia y nos dice que guardará cada movimiento cuando entramos y salimos, incluyendo la salida de este mundo y el traslado hacia la vida eterna, hacia la morada celestial.

Vivamos en esperanza, traigamos el consejo de Dios a nuestros corazones para saber responderle a Dios correctamente en el tiempo apropiado y no estemos desapercibidos como los que no tienen esperanza.

domingo, 8 de abril de 2018

El Maná, Pan Temporal. Jesús, Pan de Vida Eterna

Lectura: Juan 6:31-35
Pastor Pedro Julio Fernández

La comida que comió el pueblo hebreo era temporal, ellos debían recogerla cada día menos el sábado. Esa comida era buena, gustosa, nutritiva y era como la semilla del cilantro, blanco, y su sabor era como de hojuelas con miel (Éxodo 16:31).

El pueblo iba, lo recogía y lo molía entre dos piedras de molino, o lo machacaba en el mortero, y lo hervía en el caldero y hacía tortas con él; y tenía el sabor de tortas cocidas con aceite (Números 11:8).

Hubo maná por cuarenta años hasta que llegaron a la tierra prometida (Josué 5:12). Todo eso hace del mana una comida temporal que solo era la sombra de lo verdadero y perdurable.

Jesús se presentó en el evangelio de Juan con siete “Yo soy” y uno de ellos es ser el pan de vida eterna. Rápidamente su declaración se convirtió en tema de discusión con los judíos. Jesús hizo una correcta aplicación del alcance y bendición del pan que Dios envió a través de Moisés y de él mismo como pan que sacia para vida eterna.

La mejor bendición por el mayor alcance esta en recibir a Cristo como Señor y Salvador, este es el equivalente de comer pan eterno, pues El, habiendo ofrecido un solo sacrificio por los pecados para siempre, SE SENTO A LA DIESTRA DE DIOS (Hebreos 10:12).

Jesús es autor y garante de la salvación de todos los creyentes, él como pan es una comida que sacia para siempre el hambre y la sed de la salvación. Uno no vuelve a padecer de esa necesidad y tenemos la seguridad en su palabra. Jesús les dijo: Yo soy el pan de la vida; el que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed (Juan 6:35).

domingo, 1 de abril de 2018

La Ascensión de Jesús y la Promesa del Espíritu Santo

Lectura: Hechos 1:4-11
Pastora Belkis Fernández

Jesús apareció varias veces a sus discípulos por cuarenta días después de la resurrección. Él estuvo predicando y enseñando acerca del reino de Dios y les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual les dijo, oísteis de mí.

Dios derramaría su Espíritu, pero ellos debían estar juntos y en Jerusalén. Escuchando el consejo del Señor, los apóstoles esperaron juntos el día de Pentecostés y todos fueron bautizados con el Espíritu Santo, que es la promesa cumplida.

En 1 Corintios 12:13 dice el apóstol Pablo:

Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu.

En medio de la diversidad, Dios quiere unidad. No importa la nacionalidad o el estatus que tengas si eres un creyente, recibirás el don del Espíritu Santo al recibir a Jesús como Señor y Salvador. Allí estaban su madre, sus hermanos, apóstoles de primera línea, seguidores en general y todos fueron llenos del Espíritu Santo sin distinción de personas. (Hechos 2:4). Pero no olvides que tienes que permanecer lleno del Espíritu de Cristo, tal como dice Pablo en Efesios 5:18. A partir de ese momento el Señor empoderó a la iglesia a cumplir con la misión de ser testigos de Cristo.

Al estar juntos tuvieron la oportunidad de presenciar la ascensión de Jesús al cielo y verlo hasta que una nube lo ocultó. Juntos también pudieron recibir al Espíritu Santo que es la promesa del Padre. Todos los creyentes permanecían unidos, sujetos a los apóstoles en la doctrina, partimiento del pan y en las oraciones. Los cristianos solitarios no eran posibles.


viernes, 30 de marzo de 2018

Jesús dijo, “Consumado es”

Lectura: Juan 19:28-30

Pastora Belkis Fernández

Jesús dijo: Consumado es porque había completado el plan de redención de morir en la cruz del calvario para librarnos de la condenación eterna. En el griego la palabra consumado era utilizaba en aquel tiempo como recibos de los impuestos para indicar que se habían hecho un pago total de la deuda. (Comentario Biblia de Estudio M. Arthur. P.1472). Una relectura de Isaías 53 mejora el entendimiento del sufrimiento de Jesús por cargar con nuestras culpas.

Previo a su muerte, Jesús pidió a Juan que se ocupara de su madre. Juan, recibió a María en su casa porque ambos necesitaban estar juntos, pues era un amigo íntimo de Jesús y ambos necesitaban ser consolados.

El Señor sabía que ya todo estaba consumado, ya había enfrentado la infamia de los líderes religiosos y políticos, el rechazo del pueblo y para que se cumpla la Escritura dijo: “Tengo sed” y le empaparon en vinagre una esponja y poniéndola en un hisopo, se la acercaron a la boca y cuando Jesús hubo tomado el vinagre dijo: “consumado es”, bajó la cabeza y entregó el espíritu. Lucas registra las palabras de Jesús diciendo, Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Lucas 23:46.

Jesús muere y entregó su vida, tal como dice el evangelio de Juan:
Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar. Nadie me la quita, sino que yo de mí mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre. Juan 10:17-18

Jesús por su propia voluntad puso su vida, no fue un plan forzoso, ni por complacer a los demás. El poder y la autoridad la tiene Jesús. Hoy nosotros somos beneficiarios de la muerte vicaria de Cristo en la cruz del calvario.
¿Cuál es nuestra respuesta ante el amor eterno de Jesús? ¿Qué sentimientos experimenta que puedas hacernos comprometedores de la fe que profesamos?




domingo, 25 de marzo de 2018

El Silencio y Maltrato de Jesús, él Inocente


Lectura: Marcos 14:55-65

Pastora Belkis Fernández

Jesús, hizo silencio, mientras levantaban falsos testimonios. Le presionaban para que hablase, pero él callaba ¿Por qué tuvo que sufrir Jesús? Lo buscaban para matarlo y mal interpretaron sus palabras cuando dijo que iba a destruir el templo. ¿Cuándo decide hablar? Habla para responder a su identidad que era el Cristo y respondió diciendo “Yo Soy”. Lo catalogaron como una blasfemia, más sin embargo él contesta afirmando su deidad.

El texto bíblico luce cargado de palabras vanas, a Jesús le arreglaron su expediente para ser juzgado. A nadie se le ocurrió hablar del impacto que tuvo en los pobres, en los necesitados y a cuantas personas había sanado, sino en el peligro que constituía su presencia. Después de esto, comenzaron algunos a escupirle, a cubrirle su rostro, a darle puñetazos y bofetadas. Jesús sufrió el desprecio a causa del pecado de la humanidad.

¿Qué impacto tiene el maltrato de Jesús en nuestras vidas?

El sufrimiento pule el corazón, nos purifica y nos santifica. El apóstol Pablo dice que tenemos que completar los padecimientos de Cristo. Hay que predicar del sufrimiento de Jesús y convertirnos en portadores de las buenas noticias de nuestro libertador, de aquel que literalmente cumplió con la función de expiar nuestros pecados a través de su sangre. En el libro de los Hechos, el eunuco no entendía lo que leía, hasta que el Espíritu Santo utilizó a Felipe para explicarle lo que leía en Isaías 53:7-8 y sólo de enterarse del silencio de Jesús y su sufrimiento, bastó para entregarse y ser bautizado. ¿Quién ha creído a su anuncio? ¡Nosotros!, anunciemos este misterio que encierra verdades eternas.


domingo, 4 de marzo de 2018

Salvación para Todos

Lectura: Romanos 10:13-15

Pastora Belkis Fernández


¿Cómo la gente conocerá de Cristo? Mediante la predicación del evangelio. “Todo el que invoca al Señor será salvo”. Cuando invocas a Dios, hay una convicción fuerte y una fe viva al oír la Palabra de Dios. ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian ¡Buenas nuevas! 

En Hechos 10:24-33 Pedro fue enviado a dar la buena noticia a Cornelio y ambos recibieron el plan revelado por Dios. 

El apóstol Pablo hace algunas preguntas que nos  lleva a entender parte de los procesos de la salvación:

1. Si has Creído Invoca a Dios: La Escritura dice: “Y a Set también le nació un hijo, y llamó su nombre Enós. Entonces los hombres comenzaron a invocar el nombre de Jehová”. (Genesis 4:26).

2. Si has oído Cree: Abraham partió de Ur de los Caldeos, porque le creyó a Dios. “La fe es la actitud contraria a la confianza en sí mismo, ante el don gratuito de Dios. Comentario Bíblico Latinoamérica (2007).

3. Si Predicas alguien te Oirás: El carcelero de Filipos conoció a Jesús al escuchar a Pablo y a Silas orando y cantando himnos a Dios. (Hechos 17:25), la Palabra le llegó a través del cántico.

4. Si Dios te envía, predica su Palabra: Ten pasión por la predicación y tus pies serán hermosos, aunque se enloden al llevar las noticias de paz. Felipe fue enviado a Samaria y vidas fueron transformadas. Hechos 8:4-8.

La evangelización es responsabilidad de todo creyente y no hay otra vía. El proceso de salvación conlleva creer, invocar, oír, obedecer al llamado de cumplir con la misión. Tus pies fueron escogidos para llevar la paz en medio de la turbulencia.

domingo, 25 de febrero de 2018

Que se Llene mi Casa

Lectura: Lucas 14:15-24

Pastora Belkis Fernández

Un hombre sentado con Jesús a la mesa, le dijo, ¡bienaventurado el que coma pan en el Reino de Dios! Jesús responde con la parábola de la gran cena, donde todos los invitados pusieron excusa y nadie asistió. Uno se excusó porque compró una hacienda y necesitaba verla, ¿quién compra sin ir a ver lo que compra? Otro se excusó diciendo, he comprado cinco yuntas de bueyes, y tengo que probarlas, ¿quién compra sin antes probar? Y otro se excusó porque había acabado de casarse. Todas eran excusas baratas y no valederas, si querían podían asistir, pero hubo indiferencia y desprecio. Entonces envió a su siervo a buscar personas marginadas e hizo un plan para que se llene su casa. Vayan por los caminos y hagan a la fuerza que vengan y entren, porque el primer grupo que invité no gustará de mi cena, dijo el Señor de la cena. 

Si alguien rechaza la salvación, ¿Cuál debe ser la actitud de la comunidad de creyente? ¿Frustrarse o seguir predicándoles a otros? En la casa del Señor hay lugar para todos. (Juan 14:2) 

La reacción del Padre de familia no fue de agrado y se molestó por el desaire, pero no se detuvo en los planes de servir la cena, por eso envió a buscar personas marginadas, pecadores y gentiles. Jesús vino al pueblo de Israel y ellos lo rechazaron, pero a quienes lo recibieron les dio potestad de ser hijos de Dios. (Juan 1:11-12). El siervo le dijo al dueño de la casa se ha hecho como mandaste y aún hay lugar y el Señor le responde ve y busca más para que mi casa se llene, pero ya no más para los que rechazan sino para los que acepten la invitación.

domingo, 18 de febrero de 2018

El Creyente Lidera, Involucra a Dios y Confía

Lectura: Hechos 27:22-26; 33-38

Pastor Pedro Julio Fernández

En las peores situaciones el que conoce a Dios actúa. Daniel 11:33 presenta un escenario donde los entendidos instruirán a muchos siendo el momento muy difícil. 

No podemos permitir que el impío lidere al cristiano ni en el buen momento ni en el mal momento. Siempre debemos involucrar al Dios, hacerlo parte del problema para hallar la solución correcta y confiar plenamente en él. 

En este caso de Hechos 27 donde Pablo actúa, había un capitán del barco, un centurión romano a cargo de todos los presos que iban a Roma, pasajeros y presos. Se desató una tormenta en pleno mar y no podían controlar el curso del barco, no había luz, no comían y todos estaban desesperados y sin muchas esperanzas. Pablo exhortaba a todos a que tomaran alimento, diciendo: Hace ya catorce días que, velando continuamente, estáis en ayunas, sin tomar ningún alimento. Por eso os aconsejo que toméis alimento, porque esto es necesario para vuestra supervivencia; pues ni un solo cabello de la cabeza de ninguno de vosotros perecerá. Habiendo dicho esto, tomó pan y dio gracias a Dios en presencia de todos; y partiéndolo, comenzó a comer. Entonces todos, teniendo ya buen ánimo, tomaron también alimento. En total éramos en la nave doscientas setenta y seis personas (33-38). 

Pero ahora os exhorto a tener buen ánimo, pues no habrá ninguna pérdida de vida entre vosotros, sino solamente de la nave. Porque esta noche ha estado conmigo el ángel del Dios de quien soy y a quien sirvo, diciendo: Pablo, no temas; es necesario que comparezcas ante César; y he aquí, Dios te ha concedido todos los que navegan contigo. Por tanto, oh varones, tened buen ánimo; porque yo confío en Dios que será así como se me ha dicho. Con todo, es necesario que demos en alguna isla (22-26).

domingo, 11 de febrero de 2018

Estad Quietos y Conoced que Yo Soy Dios

Lectura: Salmo 46:10-11
Pastora Belkis Fernández

La confesión que Dios es nuestro amparo y fortaleza es esa seguridad que nos da garantía para no temer, tal como lo expresa el salmista. Las amenazas por la naturaleza de un terremoto, una catástrofe natural y los peligros que como seres humanos enfrentamos de guerras, de gente de poder y de grandes armamentos; tienen que cesar ante el poder que tiene Jehová de los ejércitos.

En este cántico de victoria y en medio de grandes amenazas, Dios manifiesta su poder como Jehová de los ejércitos, como aquel que hace callar los vientos, ponerle límites al mar, dominar la naturaleza y no hay dudas que a sus criaturas nos coloca sobre la roca que es Jesucristo, trayendo quietud, aun en los momentos más difíciles que enfrentamos.

Estad quietos y conoced que yo soy Dios; la quietud es sinónimo de sosiego, calma, tranquilidad y paz. No es tiempo de hablar, no es tiempo actuar, no es tiempo de agitar, sino más bien de estar quietos porque por más difícil que sea nuestro problema, el Señor sigue teniendo control de lo que tú y yo no podemos controlar.

Conoce a Dios, tómate un tiempo especial para que puedas escudriñar en el tesoro más grande que tenemos, su Palabra, acércate para que puedas ser oído desde su Trono de gracia. Estad quietos y espera en Dios. Termina el salmista exaltando y adorando a Dios y reconociendo su soberanía y su inminente intervención.

domingo, 4 de febrero de 2018

Dar por Generosidad y no por Exigencia

Lectura: 2 Corintios 9:1-5
Pastora Belkis Fernández

Para los de Macedonia, el participar de la generosidad era un privilegio, no una obligación o exigencia, a pesar de que eran pobres (2 Cor. 8:4), el apóstol Pablo motiva a los Corintios a desarrollar la voluntad de ser generosos. Hace mención del pueblo de Israel cuando experimentaron necesidades, Dios proveyó de tal manera que el que recogió mucho maná, no tuvo más, y el que poco, no tuvo menos. (Éxodo 16:18). La intención de Dios es que podamos practicar el amor sincero y trabajar en equipo para su obra.

El apóstol admiraba a los hermanos de Macedonia y los de Acaya que habían planificado voluntariamente su generosidad. Él quería enseñarle al pueblo de Corinto que tuvieran una actitud de preparación para ser generoso, pues ellos no iban a tener pérdidas ni iban a empobrecer, sino que iban a experimentar abundancia de su gracia.

Hay dos principios que nos interesa destacar:

1. El que siembra escasamente, escasamente segará y el que siembra generosamente, generosamente cosechará. Si invertimos poco en el Reino, Dios nos bendecirá poco y el que da abundantemente, con una actitud de abundancia no de mezquindad, Dios así mismo responderá.

2. Dios ama y bendice al dador alegre. Dar con gozo, no con tristeza, dar para abundar en buenas obras, no por necesidad, ni por exigencia. Dar conforme a lo que prometiste al Señor.

El participar de la generosidad es para el apóstol “Una obra de gracia”. 2 Cor.8:6. No por codicia ni por exigencia y no para quedarnos con dinero que debe darse. (2 Cor.9:5).

domingo, 28 de enero de 2018

Generosos para con Dios

Lectura: Génesis 14:18-23
Pastora Belkis Fernández

La generosidad es una virtud que debe ser cultivada por todos los creyentes, es una entrega sin esperar ningún beneficio a cambio. En Génesis 14:18 Melquisedec, rey y Sacerdote de Salem, de quien no se sabe su genealogía ni registro alguno bendijo a Abraham quien iba a busca de rescatar a Lot y a las demás personas cautivas de Sodoma. Melquisedec es el modelo de Jesús en su doble rol de rey y sacerdote y su nombre es rey de justicia.

Abraham recibió la bendición de Melquisedec y al regresar de la victoria, llevó los diezmos de todo el botín recuperado y devolvió el resto del dinero al rey de Sodoma, quien insistía para que Abraham lo tomara como compensación por su trabajo, pero él no aceptó su oferta porque luego iba a decir que las riquezas de Abraham venían de él y no del Dios Altísimo. Además de que lo que hizo lo hizo por la generosidad y no por nada a cambio.

¿A quién tú le atribuyes lo que tienes? ¿Por qué Abraham no tomó los bienes que le ofreció el rey de Sodoma?

Luego Dios hizo un pacto con Abraham y su fe le fue contada por justicia. (Gén.15:6). Jacob nieto de Abraham tomó el ejemplo de su padre y de su abuelo e hizo voto en Bethel, pidiendo protección y provisión y ofreció dar el diezmo de todo lo que Dios le diera.

Mantén tu generosidad para con Dios, no comprometas lo que a Dios le pertenece. ¡Ten una generosidad voluntaria! Jesús te bendice, te sostiene, te da el pan diario, no lo desprecies.

¿Quieres ser rico para contigo mismo o para con Dios?

domingo, 21 de enero de 2018

Satanás se Aparta por un Tiempo

Lectura: Lucas 4:13
Pastora Belkis Fernández

Cristo orando, ayunando y lleno del Espíritu Santo fue tentando. La Escritura dice que el diablo lo atacó y se fue para volver en un momento más oportuno para él. ¿Qué será de un creyente que no ora constantemente? Satanás vuelve a provocar y a presentarse como una opción. Hay que tener mucho cuidado.

El diablo regresó para tentar a Jesús en la persona de uno de sus apóstoles. Dice Juan 13:27 que cuando Judas comió el pan, Satanás entró en su corazón y este hombre hizo lo que ya tenía programado hacer. Judas no estaba en guardia y al igual que Acán (Jueces 7). La avaricia terminó dominando su corazón y entregó a una persona inocente. Jesús oraba para no caer en tentación y porque sabía que el adversario iba a regresar.

Hebreos 5:7 dice que Jesús en los días de su humanidad ofreció oraciones y súplicas con gran clamor y lágrimas al que podía librarle de la muerte, fue oído a causa de su temor reverente. Pablo en Efesios 4, nos manda a vivir vidas nuevas y renovadas y a no darle lugar al diablo.

Jesús fue rechazado en su vecindad, se burlaban de él y decían que tenía demonios. El conocía el corazón de ellos, en ocasiones le hacían preguntas capciosas para tentarle, pero la forma de responder lo dejaba atónitos. A pesar del rechazo sufrido, las burlas y golpes, en ningún momento le dio lugar al diablo. Cuando se acercaba su muerte, Jesús les dio ejemplo a sus seguidores de orar para no caer en tentaciones. (Lucas 22:46). Hoy tu vences al diablo, pero luego vuelve.

domingo, 14 de enero de 2018

¿Está Limitado el Poder del Señor?

Lectura: Números 11:21-23

Pastor Pedro Julio Fernández

Dios mismo le preguntó a Moisés si su poder estaba limitado, acortado, o disminuido. Aun los creyentes confiesan que Dios todo lo puede, pero no todos lo creen. Moisés se asustó porque Dios le dijo que iba a dar de comer carne por un mes a más de 2 millones de personas en el desierto.

Si uno hace un recuento desde la Creación hasta este episodio con Moisés, ¿Cuáles cosas destacan el poder y la grandeza de Dios como para pensar ahora que su poder se agotó?

A grandes rasgos vemos que Dios hizo lo creado [lo que se ve y lo que no se ve]. Castigó al mundo antiguo con el diluvio universal, cambió el lenguaje por muchos lenguajes en Babel, llamó a Abraham y le dio la promesa de la tierra de Israel. Levanto a José como preservador de vidas. Sacó al pueblo de Egipto con grandes y poderosos testimonios como la pascua, abrir el mar Rojo, enviar maná, darle agua de la roca, nube de día y columna de fuego de noche.

Ahora que el pueblo se queja y quiere carne Dios le dice a Moisés que le dará carne no por un día ni dos, sino por un mes entero y Moisés se sorprende y duda que Dios pueda hacer esto y le dijo a Dios: “El pueblo, en medio del cual estoy, llega a seiscientos mil de a pie; y tú has dicho: “Les daré carne a fin de que coman, por todo un mes.” ¿Sería suficiente degollar para ellos las ovejas y los bueyes? ¿O sería suficiente juntar para ellos todos los peces del mar?

Me gusta cómo Dios responde a Moisés con otra pregunta: ¿Está limitado el poder del Señor? Ahora verás si mi palabra se te cumple o no.

domingo, 7 de enero de 2018

Oye y Obedece

Lectura: Deuteronomio 6:4-9
Pastora Belkis Fernández

Oír y obedecer son palabras repetitivas en Deuteronomio. Oye que Jehová nuestro Dios Uno es. Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, son Uno. El ser humano es uno, aunque tenga un cuerpo, alma y espíritu. Oír y obedecer es un mandato bíblico cuando es por amor y se beneficia el que lo practica.

Moises aconseja que oiga y obedezca su Palabra, por amor a Dios. El mensaje es amar a Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas. Amar a Dios no puede ser un amor barato ni como el camaleón, según las circunstancias.

Agotamos muchas veces más tiempo, empleando los ojos y las manos que el prestar atención y escuchar. El escuchar esta en extinción y esto nos conduce más y más hacia una vida vacía e insatisfecha. Los ojos pueden conducirnos a la lujuria y a la vanidad de la vida. Emplear el método repetitivo, escuchar, leer y mucho menos meditar está en peligro.

Hay que ser genuinos maestros del amor de Dios, hay recompensa para el hijo que obedece a su padre biológico, para el trabajador que escucha el consejo apropiado, para el estudiante que presta atención, para la congregación que anuncia el mensaje de amor y esperanza. Escucha, Ama y enseña la Escritura diligentemente, no solo en un púlpito o buscando tus intereses sino con un estilo de vida Cristo céntrico. Enseña con tu ejemplo, enseña a repetir, a memorizar y a vivir como Jesús vivió.